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12 de marzo de 2007. El secretario de Estado de Economía, David Vegara, ha comparecido ante la Comisión de Cooperación al Desarrollo del Congreso de los Diputados para cumplir con los compromisos de información y transparencia en materia de deuda, plasmados en la recién aprobada Ley 38/06 de 7 de diciembre, reguladora de la gestión de Deuda Externa.

Vegara ha resaltado la importancia que la deuda externa tiene para los países receptores de la misma, ya que “contribuye a paliar la ausencia de recursos internos y acometer inversiones que, en otro caso, no hubieran sido posibles”. Además, el secretario de Estado ha recordado la importancia de los principios básicos que recoge la Ley de Deuda Externa. Concretamente los de estabilidad financiera y de condicionalidad, que buscan concentrar la atención en los problemas de sobreendeudamiento y ligan las actuaciones en materia de deuda a que los países receptores adopten las medidas necesarias a favor de su desarrollo y maximizar así los efectos sobre el progreso de estos países. Vegara ha asegurado que estos principios “evitan que la política de deuda se centre en una política sistemática de cancelación de deuda o en la concesión de donaciones a fondo perdido, y crean una cultura de crédito, con incentivos, para que el país corrija aquellas políticas que le llevaron a esa situación de sobreendeudamiento”.

Precisamente con el objetivo esencial de hacer frente a situaciones de sobreendeudamiento y promover el desarrollo económico, el secretario de Estado de Economía ha anunciado que desde el inicio de esta legislatura “el Gobierno ha condonado 1.485,6 millones de euros de deuda externa a los países en desarrollo”. Adicionalmente, y aún en tramitación, se han firmado acuerdos de condonación por importe de 189,2 millones de euros. La cantidad resultante es casi un 63% más del dinero condonado en la legislatura anterior.

David Vegara ha reseñado no sólo la importancia del esfuerzo cuantitativo que el Gobierno está haciendo en la política de condonación de deuda externa sino también el cualitativo, ya que estas operaciones se han dirigido a los países más necesitados y sobreendeudados, ligándolas a su vez al desarrollo de los mismos.

Programas de conversión de deuda

Uno de los ejes prioritarios del Gobierno en materia de Deuda Externa es impulsar los programas de conversión de deuda en inversión pública. A través de estos programas los recursos que deberían haber sido dedicados al pago de la deuda se dirigen a la financiación de proyectos de desarrollo.

Desde el punto de vista español, estos programas suponen la condonación del 100% de la deuda implicada y se han enmarcado fundamentalmente en dos iniciativas gubernamentales: la iniciativa de conversión de deuda por educación, impulsada por el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para promover la educación en Latinoamérica, y el Plan de conversión de deuda en África, dirigido a los países más pobres de este continente.

En lo que va de legislatura se han firmado 10 programas de conversión por inversiones públicas por un importe de 272 millones de euros. Con ello, España ha pasado a ser el segundo país del mundo más activo en materia de conversión de deuda.

La condonación en programas de conversión de deuda ya ejecutados asciende a 224,2 millones de euros. De éstos, 222,5 millones han ido destinados a programas de conversión por inversiones públicas en Ecuador, Uruguay, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Perú; y 1,7 millones de euros han sido condonados a Marruecos por la ampliación del programa de conversión por inversiones privadas, del que ya se ha ejecutado 3,4 millones de euros de los 6,8 millones acordados.

En África, también se han firmado y están en proceso de formalización programas de conversión por inversión pública con Mauritania, Etiopía, Uganda y Argelia, por un importe de 49,5 millones de euros.

En el ámbito multilateral, España ha adoptado una actitud muy activa en los tres últimos años, para que la iniciativa HIPC de alivio de deuda de los países pobres altamente endeudados sea más justa y eficiente.

España ha condonado más de 414 millones de euros a países pobres altamente endeudados a lo largo de la legislatura. De éstos, 80,6 millones han sido condonaciones voluntarias y adicionales a las derivadas de la aplicación estricta de la iniciativa HIPC. Este incremento en el volumen de condonación se debe fundamentalmente a la ampliación de los compromisos de España respecto a los países HIPC, incluida en el Acuerdo del Consejo de Ministro de 8 de julio de 2005 y, posteriormente, en la Ley 38/06 de Deuda Externa.

Otras condonaciones llevadas a cabo por España, dentro del Club de París, han sido a Irak y Nigeria por importe de 394,6 millones de euros. En lo que respecta a acuerdos bilaterales, se ha condonado deuda a Guatemala por importe de 452,7 millones de euros.

Retos futuros

El secretario de Estado de Economía ha anunciado que en los próximos meses se presentará al Congreso un Plan de Acción con “la plena cancelación de la deuda de los Países Altamente Endeudados (HIPC) con origen en los seguros de créditos a la exportación concedidos por el CESCE, así como la deuda proveniente del Fondo de Ayuda el Desarrollo de dichos países contraída con anterioridad al 31 de diciembre de 2003, dentro del marco de los acuerdos del Club de París”. Esta cancelación supondrá una condonación, a través de programas de conversión, de entre 335 y 380 millones de euros. A esta cifra se le sumarán otros 97 millones de euros de nuevos programas de conversión por educación en Latinoamérica y de nuevas conversiones a través del Plan África.

Por último, el secretario de Estado ha expresado su deseo de que los futuros proyectos de ley sobre la reformulación del Fondo de Ayuda al Desarrollo y del Seguro de Crédito a la Exportación no olviden que ambos son herramientas que potencian la inversión productiva en sectores prioritarios para el desarrollo, por lo que la guía han de prevenir situaciones de sobreendeudamiento y poner el acento en el desarrollo de los países receptores de los fondos.

CONDONACIONES FORMALIZADAS